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InicioCláusulas y Cadenas
Cláusulas y Cadenas

Cláusulas y CadenasES

Romántica
C. H. Dugmor  En proceso
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71Capítulos
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Resumen
Índice

Sinopsis

DoctorRomance oscuroDiferencia de edadDominanteRetorcidoContemporáneoMatrimonio por contrato

¡Prepárate para adentrarte en el fascinante mundo del BDSM! Avery es una sumisa liberada, quien deberá enfrentarse a su peor enemigo: ella misma. ¿Será capaz de recuperar su libertad y encontrar su verdadero camino en este mundo excitante, pero poco comprendido? Por otro lado, Patrick Powell luego de perderlo todo por una jugarreta del destino, se verá obligado a hacer algo que jamás creyó poder hacer para salvarle la vida a su pequeña hermana. La desesperación lo llevará a lugares inimaginables, donde descubrirá facetas de sí mismo que nunca antes había explorado. Los caminos de Avery y Patrick se cruzarán gracias a una misteriosa "diosa" que los guiará a través de un viaje de auto-descubrimiento. Juntos, se adentrarán en un mundo de sensaciones a flor de piel, placeres carnales, sumisión, dominación y amor incondicional. ¿Serán capaces de superar los obstáculos que se presenten en su camino, o sucumbirán ante la locura de un mundo que los arrastra hacia el abismo? Si buscas una historia cargada de erotismo, drama, suspenso, emociones intensas, sin los típicos clichés presentes en este tipo de novelas, Cláusulas y Cadenas es la historia que estás buscando. ¡Vivirás una experiencia que te dejará sin aliento!

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Último capítulo

  • Sobre la autora

    Nacida en Mérida, Venezuela en el seno de una familia amante del arte. La devoción de su madre por la música y el amor de su padre hacia la escritura la llevaron a recorrer un hermoso camino entre ambos mundos. Es Ariana y amante de la comida asiática.Docente de profesión. Cantante y escritora por pasión.Escribió su primera novela romántica a los 14 años, pero decidió dejar esa historia para sí y alimentarse de otros sueños.10 años más tardes, retoma la escritura y decide dedicarse de manera profesional a ella. Decide abrirse camino dentro del mundo literario, escribiendo diversas historias, siendo el romance, la ficción y el suspenso sus temas predilectos a la hora de escribir.Amante de la música metal, las novelas de Dan Brown y Stephen King, es una romántica empedernida que solo desea que sus lectores sueñen despiertos

  • Agradecimientos

    Agradezco en primer lugar a Dios, porque aunque en un momento me sentí sola y a punto de tirar la toalla, él me lleno de fortaleza para seguir adelante.A mispadres por siempre alentarme a seguir adelante.A mis hermanos, por ser ejemplo de constancia para mí.A mi familia, por sus palabras de aliento en lo momentos más difíciles.A WhipMaster, por toda esa información acerca del BDSM que me proveyó. Gracias por mostrarme un pequeño fragmento de este fascinante, pero poco comprendido mundo.A a la Licenciada Dayercy Collazo, por asesorarme en cuanto a términos de psicología. En un punto, hasta para mí, fue difícil entender a Avery.A la Licenciada Iraima Rangel, por su ayuda en la parte legal. De verdad quería que los contratos y acuerdos presentes en la historia, fuesen lo más verídicos posibles.A Kassandra Finol,

  • Capítulo 68

    Cinco meses han transcurrido desde aquella noche, en la que Derek Contini me flageló hasta la saciedad. Esa noche, sintiéndome al borde de la muerte, comprendí que había perdido muchos años de mi vida, aferrándome a un pasado que no contribuía en nada a mi presente. También entendí, que así como hay gente malvada en el mundo, existen personas buenas, dispuesta a ayudarte a superar todos los traumas que te atormentan. Isadora Gilmore es una de esas. Gracias a ella, me di cuenta que el amor verdadero nunca exige nada a cambio. Y aunque no puedo corresponderle de la forma que ella anhela, hoy en día tengo la plena seguridad, de que nuestra amistad perdurará hasta el último segundo de nuestras vidas. El rumor de lo que le hizo a Derek, retumbó con fuerza en la comunidad BDSM, haciéndole acreedora del respeto de muchos, y temor de algunos, pero también el desprecio de otros, quienes la tildaron de desequilibrada mental. Pero eso no es cierto. Yo lo sé. Isadora Gilmore es una mujer valien

  • Capítulo 67

    Kaya examina la cerradura de la puerta con detenimiento, y se da cuenta que es fácil de abrir.Patrick observa en completo silencio como la mujer usa un gancho de cabello para desbloquear la puerta.Cuando Kaya está a punto de halar la manilla, él le toca un brazo.—Dame un arma —musita él. Kaya se da la vuelta y le lanza una dura mirada—. ¿Qué? —protesta Patrick—. No sabemos que nos espera detrás de esa puerta.La mujer deja escapar un suspiro de fastidio, a la vez que se inclina un poco y rebusca en la parte interna de su bota.—Toma —masculle ella, entregándole un puñal de unos veinte centímetros de largo y empuñadura de azabache—. ¿Sabes cómo usarlo?—Entierras la parte con punta, ¿no?—Exacto —dice Kaya—. A la de tres —Patrick asiente con la cabeza, aferran

  • Capítulo 66

    Aunque Derek haya limpiado y cubierto sus heridas, eso no le ayudó a mitigar ni un poco el dolor. Siente como si en cualquier momento, la piel de su espalda se va a desgarrar y caer en pedazos al suelo.El dolor físico, mezclado con el dolor que lleva dentro de su alma, la hacen llorar copiosamente.De nuevo está inmovilizada, suspendida en el aire, pero esta vez, son cuerdas las que la mantienen atada, a la vez que siente el aliento de Derek muy cerca de su rostro.Avery cierra los ojos con fuerza, mientras siente como un par de dedos esculcan su intimidad. Por instinto, trata de moverse, pero no puede. Derek es un especialista a la hora de usar la técnica de bondage shibari. También tiene una mordaza con bola, lo que produce que la saliva chorree de su boca.—Mmmm —gime Contini—. Tal cual como lo recordaba, cara mia.Tienes el coñito más suave y apretadito que he tenido la

  • Capítulo 65

    Debe ser muy meticulosa. Sabe que si da un paso en falso, todo se irá al garete. Entrar por las bodegas le da ventaja, pero no es tonta. Agnes ya debe estar al tanto de la presencia de Kaya y Patrick, y por ende, ya debe haber reforzado la seguridad, no porque resguarde alguna joya valiosa, sino por el simple hecho de ayudar a Contini a seguirle tocando las narices.Isis nunca ha logrado comprender a qué se debe el odio desmedido que Agnes siente por ella. Hubo una época en la que ambas disfrutaban dándose caricias y follando hasta quedar completamente exhaustas, pero todo eso cambió con la muerte de Joseph y la mala influencia de Derek Contini.Tuyi se agacha y con las manos, la ayuda a impulsarse para que llegue auna ventanaalta. Isis entra a las bodega y más atrás, su acompañante. El lugar es oscuro y huele a humedad.—Es por aquí, Isis —dice Tuyi.Ella conoce el lug

  • Capítulo 64

    Continúan el camino, en completo silencio, por unos diez minutos, hasta que Isadora decide hacer una pregunta que ha estado rondando su cabeza desde hace mucho tiempo.—¿Desde hace cuánto tiempo que estás enamorado de ella?—¿Qué? —Patrick gira la cabeza de golpe hacia Isis—. Yo no...—No me mientas —espeta la mujer—. Reconozco la mirada de un hombre enamorado en cuanto la veo. A menos que seas de ese tipo de gente que se enamora a primera vista, podría jurar que el día de la subasta, cuando los presenté, ya sentías algo muy intenso por Avery.—Ahmmm... yo... —él balbucea.Isis lo mira de soslayo.—Es mejor que te sinceres conmigo, chico. No quiero pensar que eres de esos hombres que se obsesionan con las mujeres y...—La conozco desde hace mas de un año —confiesa Patrick.&

  • Capítulo 63

    El 11 de marzo del año 2012, la lujosa mansión que le heredó Joseph, abrió sus puertas al primer grupo de sumisos.En un comienzo, Isis se inspiró en la obra literaria de Pauline Réage, en la que se habla de una mansión llamada Roissy, y que era el lugar a donde los Amos llevaban a sus sumisas para que se convirtieran en perfectas esclavas. Con el tiempo, las ideas de Isis fueron transformando el lugar en una especie de museo, donde se exhibían pinturas, esculturas, fotografías y objetos alusivos al BDSM. El lugar se convirtió en un punto de encuentro para hombres y mujeres, quienes se reunían allí con el único objetivo de dar rienda suelta a la imaginación. El requisito para entrar, era simple. Cada persona debía firmar un acuerdo de confidencialidad, donde se especificaba que nada de lo que sucediera allí adentro, podía ser divulgado fuera de esas paredes.<

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71 chapters
Prólogo
Cláusulas y Cadenas/C. H. Dugmor
Liberar sus deseos e impulsos retenidos, era en un principio la meta, y Derek Contini le ayudó a conocer una parte que ella desconocía de sí misma: la hizo despertar a un mundo lleno de posibilidades. Y aunque le costó mucho dejarse llevar, en un punto del camino, dejó de sentirse culpable por disfrutar del sexo de la manera en que lo hacía junto a él. Derek la hizo sentir como una rosa azul dentro de un valle de rosas rojas. La hizo sentir especial, deseada y hermosa. Al principio, era un mundo que le aterraba, pero era solo porque estaba condicionada por toda la hipocresía que reina en la sociedad, la que inconscientemente la había contaminado de toda esa m****a “políticamente correcta” y poco a poco la fue convirtiendo en una mujer reprimida, que por lo que realmente representaba adentrarse en esa galería de placeres carnales. Junto a Derek descubrió lo delicioso y sublime del dolor, ligado al placer. Con él, logró quitarse la venda que la cegaba... El día que entró al departamen
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Capítulo 01
Cláusulas y Cadenas/C. H. Dugmor
Se pone de pie y extiende su mano hacia la ilusionada mujer que la mira con ojos llorosos. Ella se la estrecha, mostrándole una enorme sonrisa.—¿Entonces ya estoy lista? —profiere ella.—Sí —la doctora asiente con la cabeza—. Programaré la cirugía para las tres de la tarde. Quiero hacerla el lunes para evitar que entres en la semana crucial y se te presenten los dolores de parto.Avery nota que la señora Corbin deja de sonreír, y en vez de alegría, su semblante expresa nerviosismo.—¡Oh por Dios! —Exclama la mujer, abriendo mucho sus ojos—. ¡Eso es en menos de setenta y dos horas! —Se lleva una mano al pecho—. Está a punto de darme un ataque de pánico.Avery se pone de pie muy despacio, rodea su escritorio hasta llegar al lado de su p
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Capítulo 02
Cláusulas y Cadenas/C. H. Dugmor
Looren abre mucho los ojos al verla y suelta un silbido. Está muy impresionada al ver como luce su amiga. Nunca había visto a Avery con un vestido tan corto.De hecho, las únicas veces que usaba ropa tan reveladora, era cuando Derek se lo pedía porque iban a ir a alguna fiesta de Amos, o cuando le pedía que se vistiera acorde a la ocasión para alguna de sus sesiones.Lleva un vestido negro que le llega una cuarta más arriba de las rodillas, muy ceñido al cuerpo, con mangas y busto hechos de encaje, lo que le da una apariencia de transparencia muy sensual y elegante. Un par de zapatillas plateadas de tipo stiletto complementa el atuendo. Lleva el cabello rubio suelto, con leves ondas que caen en sus hombros y espalda.—¡Madre mía! Te ves espectacular —dice Looren, tratando de salir de su estupor.Avery sonríe con timidez,
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Capítulo 03
Cláusulas y Cadenas/C. H. Dugmor
La cabeza le da vuelta y todo es muy confuso para Avery. Frente a ella, yace un hombre con las muñecas y tobillos atados a la cama. Está por completo desnudo. La camisa del sujeto ha sido utilizada para vendarle los ojos.Necesita agua, pues su boca está muy seca.Camina tambaleante hasta el baño y con ayuda de una mano, toma un gran sorbo de agua del chorro del lavamanos. Se moja la cara para avisparse un poco.—¡Oye, nena! —la voz del hombre le hace dar un respingo—. ¿Por qué tardas tanto?Avery menea la cabeza con suavidad. Necesita enfocarse.—Habitación número quince del  Best Western Hollywood —dice para sí misma, a la vez que fija la mirada en el espejo frente a ella—. El hombre en la cama se llama Charles y yo... —respira profundo—, estoy a punto de v
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Capítulo 04
Cláusulas y Cadenas/C. H. Dugmor
Los parpados le pesan. El vaivén del bus en movimiento lo arrulla. ¡Está muy agotado! Lleva casi un mes sin poder descansar bien, debido a las preocupaciones.Además, lo sabía. En el momento que la idea de ir a hacerle una visita a Emma cruzó por su cabeza, supo que al día siguiente estaría más agotado de lo normal. Pero... ¡joder! Necesitaba un poco de buen sexo para desconectar un momento de su jodida realidad.Durante los últimos once meses ha estado frecuentando a su ex novia de la preparatoria, con quien tiene una extraña amistad de índole sexual. Ambos estuvieron juntos desde que Patrick tenía dieciséis años de edad, aunque la relación terminó cuatro meses después de graduarse.Resultó que Emma perdió el interés por Patrick luego de que este y su familia perdieran la privilegia
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Capítulo 05
Cláusulas y Cadenas/C. H. Dugmor
Su mirada se fija sobre el delicado cuerpo que yace sobre la cama, pero su mente está enfocada en algo más. Acaban de llegar del hospital, y Patrick no para de pensar en el montón de facturas pendientes que tienen por pagar, mientras su madre prepara algo de comer. En medio del ajetreo, no han tenido tiempo ni de almorzar.Mira el reloj de pulsera en su muñeca. Son las cuatro con treinta y siete de la tarde.Se pone de pie muy despacio, para no hacer un movimiento brusco que despierte a su hermana. Sabe que si quiere llegar a tiempo a su entrevista de trabajo, debe ir a darse un ducha de inmediato. No piensa cometer el mismo error, dos veces, en un mismo día. Esta vez no va a llegar tarde.Se da una ducha rápida y sale del baño, destilando agua a su paso.Se detiene un momento a contemplar su armario.«¿Qué coño me pongo?», piensa.Normalmente, no es una p
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Capítulo 06
Cláusulas y Cadenas/C. H. Dugmor
El hombre llamado David aparece con una bandeja entre sus manos, y Patrick ve el momento oportuno para levantarse del sofá y poner un poco de distancia entre la exuberante rubia y él. Sujeta el vaso de cristal, lleno de agua, que el caballero de traje le ofrece y se lo bebe de un trago. La señora Gilmore lo mira, entornando los ojos. Una sonrisa ladina se dibuja en la preciosa boca de labios rojo carmín, mientras se aproxima la copa de vino que acaba de tomar de la bandeja.—¿David? —tantea la rubia.—¿Sí, mi Señora?—Trae un documento y cerciórate de que el salón de juegos esté apto para visitantes.—Sí, mi Señora —asiente con la cabeza y se retira de inmediato.—¿Salón de juegos? —indaga Patrick—. ¿Documento? —él está muy confundido.<
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Capítulo 07
Cláusulas y Cadenas/C. H. Dugmor
—Mi nombre es Isadora Gilmore, pero a partir de ahora, te referirás a mi como Isis —Patrick frunce el entrecejo—. ¿Por qué Isis? Porque, en la mitología egipcia, Isis es la diosa de todos los dioses, y eso, querido, es lo que soy en esta mansión: una jodida diosa —le aclara—. Estás a punto de adentrarte en un mundo fascinante, pero poco comprendido, y hasta mal interpretado por muchos —la rubia habla a medida que camina por un extenso pasillo muy iluminado—. Te explico. Aunque parte de las siglas del BDSM sean sadismo y masoquismo, no solo se trata de ejercer violencia, lastimar o hacer sufrir a las personas. Tampoco es andar vestido de cuero o látex todo el tiempo, y utilizando fustas o látigos...—¿Entonces, Cincuenta Sombras de Grey qué es? Tenía entendido que estaba basado en el BDSM.Isis se detiene en el a
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Capítulo 08
Cláusulas y Cadenas/C. H. Dugmor
Toma una honda bocanada de aire y la suelta muy despacio. Prosigue a quitarse los guantes de látex y echarlos al bote de basura. Por una extraña razón, tiene unas enormes ganas de fumar un cigarrillo. La cirugía de la señora Corbin se complicó un poco, debido a que la pequeña Sarah tenía dos circulares, así que duró más de lo planeado, y tuvieron que administrarle un poco más de anestesia a la madre, porque a mitad del procedimiento comenzó a quejarse del dolor.Sale del quirófano luego de darle las respectivas instrucciones pos-operatorias a las enfermeras.Se dirige al ala oeste del hospital, donde se encuentra su consultorio. No pierde tiempo a la hora de abrir la gaveta de su escritorio, donde yacen ocultos una cigarrera y un mechero, en un compartimiento secreto. Los toma y sale disparada hacia
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Capítulo 09
Cláusulas y Cadenas/C. H. Dugmor
El lugar es hermoso y muy elegante. Hay música tenue, de piano, ademas del ruido de cubiertos chocando contra platos y el murmullo débil de los comensales. Un delicioso olor inunda las fosas nasales de Avery. Es una mezcla entre queso gratinado, pan recién horneado y tierra mojada, pues afuera llueve.Un muchacho de unos veinte años se aproxima a la mesa, con una botella de vino entre las manos, dispuesto a llenar las copas de las damas.Avery hace un ademán con la mano, cubriendo su copa y niega con la cabeza.—No para mí, gracias —le dice al joven.—¡Vamos! Tómate una copa —profiere Looren.Avery niega con la cabeza.—Hoy apenas es lunes. No quiero alcohol en mi torrente sanguíneo —es la tajante respuesta de la rubia.Looren sujeta la copa de cristal, se la aproxima a su nariz, inhala profundo, bebe y degusta el vino.—Mmm.
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